No puedo continuar mi blog sin antes hablaros de la araucaria. Su nombre científico es Pinus araucana (osea de la familia de los pinos) y su nombre común, cola de macaco (imaginar solos el por qué). La araucaria es un árbol de Chile y Argnetina, que vive en terrenos rocosos, arenosos y húmedos, normalmente de origen volcánico, en alturas donde la nieve permanece sobre el suelo durante largas temporadas y generalmente en lugares de bajas temperaturas.

Este “siempreverde” árbol tiene un tronco recto y cilíndrico que puede alcanzar hasta 50 m de altura y 3 o más metros de grueso. Además, algunas han alcanzado hasta 1000 años de edad, aunque crecen muy lentamente. Enormes y antiguos, ¡pedazo árboles!
Y respecto a la cuestión utilitaria, la madera de araucaria, por ser compacta, liviana, fácil de trabajar y de un hermoso color blanco amarillento, es muy cotizada para labores de construcción y carpintería en general. Antiguamente los troncos rectos y cilíndricos de esta especie eran empleados en la fabricación de mástiles para embarcaciones. En la actualidad está prohibida la corta de la araucaria, pues fue declarada Monumento Natural de Chile. Las semillas o piñones son comestibles y tienen alto contenido enérgetico. Constituyen la base de la dieta de los araucanos. (Reconozco que toda esta información la he sacado de wikipedia, ya sabéis, tiene respuesta para todo).
La siguiente vez sigo con una flor: el copihue. flor nacional. Y no digo que cierro el capítulo de la biológica, pues estando en esta región es casi imposible.