Otra información para añadir a la culturilla general. Resulta que en las fiestas patrias también es típico ir a volar "volantines" (osea cometas para nosotros) y la razón no es otra que: porque es la temporada en que hace más viento. Así que tuve la oportunidad de volarlos. La idea era que los pequeños, los sobrinos de Jose, Enzo y Tote, tuvieran la oportunidad, pero... al final nos lo pasamos mejor los adultos que ellos, pues hay que reconocer que es una actividad que tiene su maña.

Siguiendo en Temuco, algo de lo que no había hablado y que se da con frecuencia en Chile: los asados. Como véis en la foto, las barbacoas no son precisamente pequeñas, cuando se ponen, se ponen. Y eso que aqui no eramos un grupo tan grande.... me enseñaron una vez una foto donde aparecían 250 corderos asandose a la vez, para alimentar a un pueblo.... Luego decimos de los vikingos, aqui está su origen. Sobre todo lo de Chiloe, ahí si que arman unos tremendos asados hasta para celebrar la caída de las hojas, osea.............. por todo.


En esta ocasión el asado surgió porque sí, no créias que iba a ver un motivo... Bueno en el fonodo luego siempre hay algo que celebrar, pero bueno... Se podría decir que este encuentro de compañeros de trabajo de la Universidad Católica de Temuco sirvió para dar por inauguradas las cuecas de las fiestas patrias, que iban a ser en breve (el 18 de septiembre, algo de cultura). ¿Y qué es una cueca? es el baile nacional de chile: se baila con un pañuelo blanco y más cosillas, pero como aún no lo conozco no os describo más.

Ya en Temuco, de nuevo, no faltan las visitas a la casa de Zenen -en la foto Zenen y familia. Hay que decir que aquel día fue especial, no sólo porque hicimos huevos rellenos de huevos, como dice alguno que yo me sé, sino porque se incorporó un nuevo miembro en la familia: Quica, una boxer super simpática, que trae a todos de cabeza y que a dado mucha alegría a la casa.

Lo bueno de estar fuera es que uno tiene que irse, entonces es habitual que se organicen despedidas. Es habitual y es rico, jejeje... En esta ocasión mis amigas decideron hacerme la despedida cenando en el Asian Chic -como podeis ver en la foto, ese cartel chiquitin sobre nuestras cabezas. Estuvo genial. Espero que podamos repetirlo en otra ocasión y por cualquier otro motivo, la cuestión es juntarse.